Page:Levoyageauparnas00cerv.djvu/105

Le texte de cette page a été corrigé et est conforme au fac-similé.
XCV

Del’ amarga prision triste y escura,
adonde mueren veinte mill christianos,
tienes la llave de su cerradura.

Todos (qual yo) de alla, puestas las manos,
las rodillas pur tierra, solloçando
cercados de tormentos inhumanos,

Valeroso Señor, te están rogando
bueluas los ojos de misericordia
á los suyos que están siempre llorando.

Y pues te dexa agora la discordia,
que hasta aqui te ha opprimido y fatigado,
y gozas de pacifica concordia;

Haz, o buen Rey, q. sea por ti acabado
lo que con tanta audaçia y valor tanto
fue por tu arnado padre començado.

Solo el pensar que vas pondrá vn espano
en la enemiga gente, que adeuino
ya desde aqui su pérdida y quebranto. »

¿Quién dubda q. el Real pecho begnino
no se muestre, escuchando la tristeza
en que estan estos miseros contino?

Bien paresce q. muestro la flaqza.
de mi tan torpe ingenio, q. pretende
hablar tan baxo ante tan alta Alteza;

Pero el justo desseo la defiende…
mas á todo silencio poner quiero
que temo q. mi pluma ya os offende,
y al trabajo me llaman donde muero.


SONETO DE MIGUEL DE CERVÁNTES, GENTILHOMBRE ESPAÑOL, EN LOOR DEL AUTHOR.

¡O quan claras señales habeis dado,
alto Bartholomeo de Rufino,
que de Parnaso y Ménalo el camino
haueis dichosamente paseado!

Del siempre verde lauro coronado
sereis, (si yo no soy mal aduino)
si ya vra. fortuna y cruel destino
os saca de tan triste y baxo estado;